En la actualidad la mayoría de las personas prefieren utilizar el pasto sintético, debido muchos motivos, y estas son algunas razones por lo que el pasto natural es cada vez menos utilizado.
El pasto sintético es tan versátil que su uso no tiene restricciones, pero la utilización de césped natural en áreas internas de los hogares, oficinas, centros comerciales, etc., la estructura debe ser modificada y adecuada para evitar que la humedad deteriore el espacio, genere moho, deterioro de pintura entre otros, algo que con el sintético no ocurriría.
Los insectos no se sienten atraídos por el pasto sintético por el simple hecho de no tener tierra, esto es algo que lo vuelve muy seguro para los niños, las mascotas y hasta para nosotros mismo.
El pasto sintético no requiere de cuidado constante, su mantenimiento se limita a simplemente lavarlo esporádicamente, con regarle agua y rastrillarlo para quitarle suciedades que se puedan acumular es suficiente.
El pasto natural si requiere de constantes cuidados, se debe regar, podar y en muchos casos fertilizar y es increíble cantidad anual de agua que se utiliza para que se mantenga bonito y muy verde. Las canchas de tamaño promedio requieren de unos 500 mil galones de agua al año.
El sol muy intenso puede hacer que el césped natural se seque y adquiera un aspecto marrón, seco, deteriorado. En general el clima extremo puede afectar el pasto natural de manera negativa, en cambio, el pasto sintético siempre se conservará verde y hermoso en cualquier estación de año.
Ya son incontables las canchas deportivas que utilizan el pasto sintético, es muy similar al pasto natural, pero con mayor estabilidad y soporte. Actualmente el pasto sintético es avalado por la FIFA.
El pasto natural en las canchas deportivas, necesita tiempo de descanso después de alguna práctica o partido para que pueda ser utilizada de nuevo, si este descanso no es respetado, el pasto puede desgastarse y deteriorarse.
Pasto sintético
