Al momento de realizar compras de pasto sintético muchas personas cometen ciertos errores, como fijarse primariamente en el precio, las puntadas o la altura. Sin duda, estos son factores importantes que se deben tener en cuenta, pero no deben ser el punto de partida.
Para acertar con la elección del pasto sintético se debe definir primordialmente qué utilidad se le dará, si será pasto residencial, si quieres una pared de pasto artificial, si es para terrazas, jardín, alfombras, si se utilizará en el exterior o en el interior del hogar, si es para una cancha deportiva etc.
El precio es un punto importante a la hora de elegir el pasto sintético, no siempre el más caro suele ser el de mejor calidad. Hay muchas empresas muchas empresas compitiendo en el mundo del pasto artificial, y la calidad puede variar mucho.
La mayoría de las veces el precio puede variar según los materiales involucrados en la fabricación del pasto sintético. Por ejemplo, el de Polietileno suele ser el más suave y resistente que el pasto sintético de Polipropileno, que es un poco menos suave y menos caro.
Es importante que el pasto sintético tenga una buena resistencia a las pisadas, esto indica que el pasto sintético pueda recuperar su forma o altura inicial luego de las pisadas, más llamado como efecto memoria.
La altura del pasto se debe elegir a gusto y preferencia, pero es un mito que mientras más altura tiene mayor calidad. La cantidad de puntadas es algo en lo que debemos fijarnos. Un pasto sintético con exceso de puntadas puede disminuir el aspecto de natural y aumentará la temperatura en temporadas de verano ya que será una superficie muy compacta.
El drenaje es importante en el pasto sintético para que no se empoce los líquidos y cree malos olores, bacterias o deteriore el material. Los modelos que tienen una capacidad de drenaje de 60 litros por minuto son ideales.
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